El expresidente de la Federación Internacional de Atletismo, Lamine Diack, está en el banquillo de los acusados de un tribunal de París, que lo estará juzgando por el presunto cobro de comisiones ilegales a cambio de ocultar el dopaje de atletas rusos.
El hombre que dirigió el atletismo mundial entre 1999 y 2015, nacido en Senegal, llegó al Tribunal Correccional de París visiblemente debilitado. Tiene 87 años de edad.
Está imputado principalmente por corrupción activa y pasiva, además de blanqueo de capitales en banda organizada.