Colombia fue sede del taller regional de la OMS sobre seguridad vial

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Colombia fue sede del taller regional de la Organización Mundial de la Salud OMS sobre seguridad vial para periodistas de América Latina. El espacio de formación contó con la participación de 15 comunicadores de Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador y México, reunidos durante tres días en Bogotá, del 30 de mayo al 1 de junio.

“Como periodistas, ustedes juegan un papel fundamental para hacer que el poder rinda cuentas, hablar en nombre de los más vulnerables y exponer con valentía los problemas de la sociedad que requieren solución. La crisis de las muertes en nuestras carreteras no es la excepción porque, a pesar del progreso, los sistemas de transporte que usamos cada día todavía representan peligros con riesgos inaceptables para todos”, sostuvo la Dra Gina Tambini Gómez, representante de la OMS en Colombia durante la apertura del taller.

El objetivo de este espacio es mejorar las habilidades, conocimientos y competencias de los participantes para producir reportajes de calidad o para capacitar en seguridad vial a colegas periodistas. De esta forma, podrán contar más historias y de mejor calidad que contribuyan a reducir los riesgos de siniestros viales. El taller es parte de la Iniciativa para Reportajes sobre Seguridad Vial de la OMS, que a su vez integra la Iniciativa Filantrópica de Bloomberg para la Seguridad Vial Global.

“Ninguna muerte prematura en el tráfico es aceptable. Todas pueden tener acciones para prevenirlas”, sostuvo Darío Hidalgo, uno de los conferencistas del taller en Colombia. El ingeniero civil y especialista en evaluación de proyectos de la Universidad de Los Andes explicó la importancia de la seguridad vial en la Agenda 2030, orientada a lograr cero muertes en siniestros viales. “La imprudencia no tiene que conducir a la muerte de las personas”, agregó Hidalgo, quien también cuenta con maestría y doctorado en Ingeniería de Transporte de la Universidad Estatal de Ohio.

Por su parte, Andrés Vecino, economista de la salud e investigador con más de 15 años de experiencia, destacó la necesidad del uso del cinturón de seguridad, la reducción de los límites de velocidad y el uso del caso con estándares apropiados de calidad para reducir el riesgo de siniestros viales.

De igual forma, en el taller se abordaron distintos temas asociados al impacto de estos siniestros y la manera de prevenirlos. Allan Bachenheimer Ingeniero Industrial con experiencia en desarrollo industrial, Industria 4.0 y nuevas tecnologías automotrices explicó, por ejemplo, que no todos los vehículos cumplen con los mismos estándares de calidad, lo cual supone mayor o menor riesgo en las vías.

Juan Manuel Martínez, cirujano general e intensivista, bombero voluntario y director médico y de gestión clínica de la Clínica Nueva de Bogotá, abordó los factores de riesgo para lesionarse; entre ellos, la estructura corporal, las patologías crónicas, las características propias de cada órgano y las posturas corporales.

En el taller regional sobre seguridad vial para periodistas de América Latina también participaron expertos como Jessica Kisner, gerente de proyectos de seguridad vial de WRI Colombia (Instituto de Recursos Mundiales) quien profundizó en la relevancia de la seguridad infantil; Federico Tucci, gerente de comunicaciones de la Fundación Gonzalo Rodríguez de Uruguay, quien abordó el tema de motocicletas en el tránsito y Valentina Ochoa, licenciada en Ciencia Política en el Instituto Tecnológico de Monterrey sobre presiones de la industria sobre la prensa.

Asimismo, la Agencia Nacional de Seguridad Vial de Colombia dio a conocer a los periodistas latinoamericanos el Observatorio Nacional de Seguridad Vial, una herramienta que apoya y orienta el diseño, monitoreo, seguimiento y evaluación de las políticas públicas en el país sede del taller.

Las facilitadoras de este espacio formativo fueron Deborah Potter y Mercedes Sayagues, capacitadoras en periodismo con amplia experiencia. Una de las recomendaciones a los periodistas participantes ha sido llamar a las cosas por su nombre. Emplear el término siniestro vial en lugar de accidente de tránsito cambia la percepción del problema, subrayaron. De igual forma, en los reportajes sobre seguridad vial es importante hablar no solo del resultado, como las muertes que dejan estos siniestros, sino de las causas y las acciones que pueden ayudar a prevenirlas. Adicionalmente, explicaron por qué la seguridad vial también es un tema de equidad, como quiera que las mujeres están más expuestas a riesgos en las vías por lo cual se requieren políticas públicas que permitan protegerlas.

Mediante reportajes en profundidad con un enfoque de soluciones, la prensa puede contribuir a reducir la siniestralidad vial y a repensar la movilidad y el tránsito con el criterio de Visión Cero.

Un desafío de todos

Se estima que más de 1,3 millones de personas mueren en siniestros vuales cada año en todo el mundo. Los traumatismos causados ​​por estos hechos son la principal causa de muerte de niños y adultos jóvenes de 5 a 29 años. Más de nueve de cada diez de estas muertes ocurren en países de ingresos bajos y medios.

Alrededor de 155.000 personas mueren por traumatismos en siniestros viales en la región de las Américas cada año, lo que representa alrededor del 13% de todas las muertes por siniestros viales en el mundo.

En la región de las Américas, la siniestralidad vial es la principal causa de muerte en niños de 5 a 14 años y la segunda causa en el grupo de 15 a 19 años. Cuatro de cada 10 muertes viales corresponden a peatones, motociclistas y ciclistas con el 23%, 15% y 3% del total, respectivamente.

“Al arrojar luz sobre la seguridad vial en sus reportajes (profundizando más allá de los accidentes individuales para buscar causas más profundas y soluciones sistémicas), los periodistas pueden ayudar a resolver una crisis prevenible y, en última instancia, ayudar a salvar vidas”, señaló la representante Tambini.

El Plan Global para la Seguridad Vial

El Plan Global para la 2da Década de Acción de las Naciones Unidas para la Seguridad Vial traza un camino para que los países alcancen el objetivo global de reducir a la mitad estas muertes prevenibles para 2030.

Actualmente, la Región de las Américas no está en camino de alcanzar la meta de reducción del 50 %, por lo que los gobiernos y las sociedades debemos redoblar nuestros esfuerzos para poner fin a estas tragedias prevenibles.

El Plan Global exige un cambio de un enfoque centrado en siniestros o choques individuales, usuarios de la vía individuales o intervenciones individuales a una mirada más holística a nuestros sistemas de movilidad en general.

Con un enfoque incesante en la seguridad, los gobiernos y las sociedades debemos trabajar con todos los involucrados en el diseño y mantenimiento de nuestras vías, la fabricación de vehículos y la administración de los sistemas de transporte. De modo que, cuando ocurren siniestros, los sistemas ayuden a mitigar el riesgo de muerte o lesiones.

Al fomentar un mayor uso peatonal de las vías y de bicicletas, podemos reducir la carga de enfermedades no transmisibles, reducir la contaminación y ayudar a combatir el cambio climático.

De igual forma, al priorizar la seguridad de los usuarios viales vulnerables, como peatones y ciclistas, podemos reducir la pobreza y abordar las desigualdades, incluido el acceso al trabajo, la educación y la igualdad de género.