La variante Delta del coronavirus está aumentando de manera preocupante los contagios de covid-19 en numerosos países del mundo, donde se intensificaron las restricciones, y provocando situaciones insólitas como la llegada de la antorcha olímpica a Tokio este viernes a un estadio totalmente vacío.
Ante el avance de la variante Delta, los laboratorios Pfizer y BioNTech anunciaron el jueves que pedirán autorización para una tercera dosis de su vacuna anticovid para reforzar su eficacia.
Datos preliminares mostraron que una tercera dosis incrementa los niveles de anticuerpos de cinco a diez veces más contra la cepa original del coronavirus y la variante Beta, hallada por primera vez en Sudáfrica, en comparación con las dos primeras dosis, según las compañías.
También dijeron que la dosis de refuerzo actuará de manera similar contra la variante Delta, pero que igualmente desarrollarán una vacuna específica contra esa cepa.
La Unión Europea dijo el viernes está “preparada” por si hiciera falta administrar a su población una tercera dosis.
En ese momento un 65% de los ciudadanos de la UE tiene puesta una primera dosis y el 47% las dos y la comisaria de Salud, Stella Kyriakides, advirtió de que Europa está “en una situación muy frágil, por el incremento de casos debido a la variante Delta”. “No es momento para complacencias”, enfatizó.
La variante Delta, identificada por primera vez en India y considerada la más contagiosa, está causando una aceleración de la pandemia que ya registra más de cuatro millones de muertos, según un recuento de AFP a partir de datos oficiales.
Eso llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a advertir de que el mundo se encuentra “en un punto peligroso”.