Supersalud extiende por un año intervención del Hospital San Andrés de Chiriguaná, Cesar

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La Superintendencia Nacional de Salud prorrogó por un año la medida de intervención forzosa que tiene sobre el Hospital Regional San Andrés ESE de Chiriguaná, en el Cesar, con el objetivo de lograr su estabilidad financiera y administrativa, y brindar una mejor atención en salud a cerca de 250.000 usuarios del departamento.

Según la resolución 5013 del pasado 12 de junio, la Supersalud ordena al agente especial interventor desarrollar tareas como la de ejecutar los recursos que le fueron asignados a través del Fonsaet y elaborar en menos de 45 días un estudio que proyecte la sostenibilidad técnico-científica y financiera para reactivar los servicios del segundo nivel de atención del hospital.

Cabe anotar que en el ejercicio de resultados de 2019, el hospital reflejó un déficit de 9.262 millones de pesos, así como un alto grado de iliquidez y todavía un bajo nivel de recaudo, por lo que, entre otras, la Supersalud ordenó adelantar las actividades tendientes a lograr la razonabilidad de los estados financieros.

*Avances en atención
En la medida de prórroga, la Superintendencia dice que la entidad logra avances en la depuración contable y saneamiento financiero, permitiendo emitir cifras con mayor grado de confiabilidad a fin de revelar la real situación del hospital.
Según el informe de la interventoría, durante el primer año se han reabierto y rehabilitados servicios de segundo nivel como urgencias, hospitalización, medicina especializada, servicio quirúrgico, laboratorio clínico, tomografía, radiología e imágenes diagnósticas, terapia física y respiratoria, ginecobstetricia, medicina interna, pediatría, anestesiología, cirugía general y ortopedia.

Los pasivos se han reducido en 13.6 %, pasando de 33.000 millones de pesos a 29.0000 millones en el último año. También, se saldó la nómina de los trabajadores y se logró detener las demandas judiciales en un 40 %.

Durante los próximos 12 meses, el hospital deberá realizar el seguimiento a los proyectos de inversión de infraestructura física y dotación de equipamiento biomédico ante las entidades de competencia para el cumplimiento de los estándares del sistema único de habilitación, así como de los estándares de calidad del centro hospitalario.