Los sorteos promocionales, que las diferentes empresas o entidades realicen con fines de publicidad o promoción de bienes o servicios, deben contar con la autorización de la Empresa Departamental de Juegos de Suerte y Azar, Edusuerte.
De acuerdo con el gerente de la entidad, Pedro Fayad, son muchos los establecimientos que ofrecen un premio al público, sin que para acceder al juego se pague directamente, desconociendo que para ello, deben cumplir con unos requisitos y contar con la respectiva autorización, tal como lo establece la ley 643 de 2001.
La ley dispone que todo juego de suerte y azar debe contribuir eficazmente a la financiación del servicio público de salud.
“Un juego promocional es el que realiza una empresa, una marca, un centro comercial, entre otros, para promocionar un producto y las personas que participan en el juego no pagan nada. Todos los juegos de suerte y azar que existen en el departamento, deben pagar un impuesto del 14 por ciento a Edusuerte, recursos que van para la salud de los atlanticenses”, explicó Fayad.
El gerente de Edusuerte dijo que hay empresas que realizan estas promociones, inclusive por redes sociales, evadiendo el pago del respectivo impuesto. Hay casos de almacenes y distribuidores que están haciendo rifas promocionales sin permiso de la empresa departamental, ni la autorización de las respectivas loterías que utilizan para dichos sorteos.
Igualmente, recordó que comprar o vender rifas y chance no autorizado tiene penas privativas de la libertad hasta de ocho años, reiterando a los diferentes establecimientos de comercio cumplir con los requisitos que establece la ley y de esta forma evitar sanciones o multas.
En el caso del chance no autorizado, Edusuerte actualmente funge como víctima en 16 procesos penales por la conducta punible de “ejercicio ilícito de actividad monopolística de arbitrio rentístico”.
A pesar que existe un total de 37 procesos en el archivo de la entidad, solo 15 se encuentran en etapa de juicio, 10 en indagación, ocho se encuentran inactivos y cuatro han terminado por sentencias o pre acuerdos.