Colombia se prepara para hacer una exposición ambiciosa en la 29ª Conferencia de las Partes en Bakú, Azerbaiyán, enfocándose en la interdependencia entre la biodiversidad y el cambio climático. La delegación colombiana, encabezada por la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, resaltará cómo la protección de ecosistemas como la Amazonía, que absorbe la mayoría de las emisiones del país, es crucial para combatir el cambio climático.
En un contexto donde los efectos del calentamiento global se sienten cada vez más en el país, la ministra Muhamad subraya la urgencia de integrar la conservación de la biodiversidad en las políticas climáticas, no solo a nivel local, sino también en un esfuerzo internacional coordinado. Según Muhamad, el uso sostenible y la protección de los ecosistemas deben jugar un papel central en la lucha contra el cambio climático. Esto incluye una gestión más eficaz de la Amazonía, que es fundamental para la regulación climática y la preservación de una enorme riqueza de especies.
Uno de los puntos cruciales que Colombia llevará a la COP29 es la necesidad de implementar un enfoque global que permita tanto la reducción de emisiones de carbono como la preservación de la biodiversidad. La ministra Muhamad ha llamado a los países del G20 a tomar medidas concretas, comprometiéndose con reducciones de emisiones y apoyo financiero a países en desarrollo. Señaló que el modelo económico actual debe transformarse para que sea sostenible y compatible con los objetivos ambientales. Este cambio debe contemplar la protección de la biodiversidad como una parte esencial de los acuerdos internacionales sobre cambio climático, debido a que estos recursos naturales también actúan como sumideros de carbono.
Colombia también hará un llamado a la comunidad internacional para que cumpla con sus compromisos de financiamiento en el marco del Fondo Verde para el Clima y otras fuentes de cooperación internacional. Para la ministra, el financiamiento no debe ser una promesa vacía sino un compromiso real que permita a los países cumplir sus metas ambientales. La ministra destacó que el costo de las acciones climáticas y de conservación debe ser compartido de manera equitativa entre las naciones, especialmente considerando que los países desarrollados han contribuido en mayor medida a la crisis climática actual.
El país tiene previsto presentar estrategias concretas y casos de éxito en la protección de ecosistemas vitales como páramos y bosques, que han sido esenciales para reducir las emisiones y conservar la biodiversidad. Colombia subrayará cómo la degradación de estos ecosistemas, especialmente la deforestación en la Amazonía, ha exacerbado las emisiones y reducido la capacidad del país para enfrentar el cambio climático.
En este sentido, Colombia busca liderar un esfuerzo colectivo en la COP29, exhortando a otras naciones a reconocer que la protección de la biodiversidad no es solo un asunto ambiental, sino una necesidad imperante para la estabilidad climática global. Con la esperanza de establecer alianzas internacionales y concretar compromisos, Colombia espera que la COP29 sea un punto de inflexión en la integración de la biodiversidad y el cambio climático en políticas de alcance global.