Los propietarios de 50 tiendas en barrios populares de estrato 1 y 2 de Barranquilla y 100 del Atlántico cerraron por la crisis económica que les generó la pandemia de la COVID-19.
De acuerdo con Orlando Jiménez, directivo de Undeco, los dueños de estas tiendas ahora trabajan como vendedores ambulantes, en el mercado o como taxistas para subsistir.
A muchos de los tenderos las ganancias no les generaba lo suficiente para pagar servicios públicos y los ayudantes que tenían contratado.
Señaló que están a la espera de cómo evoluciona la pandemia y mirar sí pueden hacer préstamos bancarios y abrir nuevamente.