El Borussia Dortmund celebró su victoria por 4-0, ante el Schalke 04, frente a la icónica curva sur de su estadio, que es conocida como la pared amarilla, hecho que ha sido visto como un homenaje a la afición ausente.
Los jugadores del Dortmund, mostraron en la celebración de los cuatro goles, un claro respeto a las normas de no abrazarse, ni aproximarse a los compañeros.