Por consenso, los dueños de bares en Barranquilla determinaron que no es viable reabrir los establecimientos con la prohibición de la venta de alcohol como lo estableció el Gobierno.

Jorge Barrios, representante de Asonocturnos en Barranquilla, afirmó que si el objeto de sus negocios es vender alcohol y no se los pemitirán, prefieren esperar y abrir cuando la actividad comercial esté lista completamente.

Para Barrios, reabrir significaría perder los acuerdos realizados con los propietarios de locales comerciales.
” Los propietarios de los locales pueden asumir que ya se pueden responder con los cánones de arrendamiento. Esto además, representa un gasto: pago de nómina, servicios, mantenimiento”, indicó.
Expresó que le agradecen al Gobierno Nacional que los tenga encuenta en los planes piloto.