Entre enero y agosto de este 2023 se han cometido 239 homicidios en el departamento, cuando en el mismo periodo del año anterior se registraron 123, lo que se traduce en un aumento cercano al 100%. La escalada de violencia ha permeado localidades que durante el 2022 no registraron hechos de esta naturaleza, como Toluviejo, Los Palmitos, San Antonio de Palmito, San Juan de Betulia y La Unión.
Entre enero y agosto de este año fueron cometidos 239 homicidios en el departamento, cuando en el mismo periodo del 2022 se registraron 123, lo que representa un aumento del 94%.
“El control que ejercen las Autodefensas Gaitanistas de Colombia en el territorio, las dinámicas del crimen, además de la presencia de otras estructuras armadas ilegales tienen inmersas en un escenario de permanente riesgo a las comunidades”, aseguró el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.

Sincelejo, la capital, fue el lugar en donde más se registraron, 107 asesinatos, entre enero y los primeros cinco días de septiembre de este año, que, comparada la cifra con el mismo periodo del 2022, cuando ocurrieron 53, el aumento fue del 102%.
Para el caso de Corozal, el año pasado las autoridades reportaron la comisión de siete homicidios; sin embargo, este año ya son 18, lo que significa un aumento del 157%. En Sincé, la cifra se disparó un 450%, pues de dos asesinatos ocurridos en el 2022, se pasó a 11 en 2023. En Tolú, la cifra también varió, ya que de cuatro casos registrados el año anterior, se pasó a 15 en esta vigencia, lo que se traduce en un aumento del 275%.

Poblaciones que ahora registran homicidios
Y es que los asesinatos han venido rompiendo abruptamente la tranquilidad de poblaciones que el año pasado no reportaron este tipo de hechos violentos, como en los municipios de Toluviejo (11 casos durante el 2023), Los Palmitos (seis), San Antonio de Palmito (tres), San Juan de Betulia (dos) y La Unión (uno).
Lea también: Defensoría del Pueblo rechazó asesinato de tercer funcionario en La Guajira