La Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) ha asegurado que la vacuna de AstraZeneca y la Universidad de Oxford puede seguir administrándose, mientras se investigan los posibles casos de trombos que han comunicado varios países. Desde el organismo han apuntado que “los beneficios continúan superando los riesgos”.
Dinamarca ha sido el primer estado miembro de la Unión Europea en pausar la vacunación con esta profilaxis. Lo ha hecho después de comunicar casos graves de trombos en personas que la habían recibido, aunque han subrayado al mismo tiempo que no pueden concluir que haya una conexión.
Varios han sido los países que han seguido los pasos daneses. Pocas horas después Austria, Noruega, Lituania, Islandia, Letonia y Luxemburgo se han sumado a la lista. Italia ha sido el último en hacerlo.
Las autoridades italianas han paralizado la vacunación con las dosis del lote ABV2856, tras la muerte de dos personas a las que se les había inyectado. La Agencia Italiana de Medicamento ha destacado que, por el momento, no han encontrado ningún vínculo entre la vacuna y los fallecimientos.
“Actualmente no hay indicios de que la vacunación haya causado estas afecciones, que no se enumeran como efectos secundarios con esta vacuna”, ha aseverado la EMA en un comunicado. A continuación han reiterado que “el número de cuadros tromboembólicos en vacunados no es mayor que el observado en la población general”.
El ministro de Sanidad francés, Olivier Véran, ha expresado durante una rueda de prensa que “no es necesario suspender la vacunación con AstraZeneca en Francia”. Al igual que la EMA, Véran ha destacado que los beneficios de seguir administrándola superan notablemente a no hacerlo.