Familiares de los internos de la cárcel Rodrigo de Bastidas de la ciudad de Santa Marta, protestan al frente del Palacio de Justicia para exigir al Inpec que les permita el contacto con sus seres queridos. Advierten que 45 minutos son insuficientes para estar junto a ellos. Así mismo abogan por la visita conyugal.
Miembros de este movimiento cívico aseguran que los internos están ‘secuestrados’, porque, además, les estarían presuntamente violando algunos derechos a quienes cumplieron parte de las condenas, como permisos por 72 horas, entre otros.
La cárcel Rodrigo de Bastidas tiene 926 personas privadas de la libertad, y el último caso de COVID-19 recibió tratamiento según los protocolos establecidos.