Este jueves 28 de marzo fueron sepultados los cinco hermanos yukpa bajo tradiciones de esta etnia, a la altura del asentamiento Kchusweye, en la vereda el Limón, en Codazzi, Cesar.
Ante la incertidumbre sobre cómo ocurrieron los hechos, los padres de los niños solicitaron la cooperación y apoyo del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, y autorizaron la práctica de las necropsias y otros estudios médicos complementarios.
Los defensores de Derechos Humanos y autoridades indígenas yukpas tienen la hipótesis de un posible asesinato teniendo en cuenta que los miembros de la etnia desde muy pequeños aprenden las bondades y peligros de la naturaleza.
Esto quiere decir que de acuerdo con sus costumbres identifican los alimentos que no se pueden consumir de la tierra, por lo que descartan que haya sido un episodio accidental.
Se le suma además que la niña de 15 años tenía heridas en la cabeza, su vestido estaba rasgado y fue su cuerpo fue encontrado afuera de la vivienda a diferencia de sus dos hermanas menores que quedaron muertas al lado del fogón donde estaban preparando bollos de maíz.