La alcaldía de Santa Marta reiteró el llamado a los samarios a la autoprotección de la vida, ante la amenaza de creciente súbita y deslizamientos. Jorge Lizarazo, jefe de la Oficina para la Gestión del Riesgo y Cambio Climático (Ogricc), entregó las recomendaciones necesarias para reducir los riesgos de desastres.
En la ciudad persiste la alerta por deslizamiento en zonas de ladera y alta pendiente por creciente súbita en los ríos y sus afluentes.
Pidió a la ciudadanía seguir las recomendaciones de reducción del riesgo emitidos por la OGRICC para evitar situaciones que pongan en riesgo la vida de los ciudadanos como ocurrió en días pasados con un grupo de bañistas con la creciente del río Bonda.
Advirtió a la ciudadanía que debe abstenerse de:
Ingresar a ríos quebradas y al mar en zonas de desembocaduras.
No realizar senderismo o escaladas deportivamente en zonas de ladera o alta pendiente.
Si residen sobre rondas hídricas monitorear de manera constante el caudal del río o quebrada y evacúe, si ésta registra incremento súbito o si evidencia procesos erosivos en la base de su vivienda.
Si residen obre la ronda hídrica y el río o quebrada cercana a su vivienda registra una creciente súbita lleve un lugar seguro a niños, personas con movilidad reducida y ancianos.
Si reside en zonas propensas a desbordamiento alce sus enseres y lleve un lugar seguro a sus mascotas.
Si su vivienda está ubicada sobre un cerro y durante las lluvias las escorrentías arrastra sedimentos o rocas, evacúe.
Si reside en zonas de cerros y observa árboles que presentan riesgo por su grado de inclinación, comuníquese a la línea 119 de los bomberos voluntarios de la ciudad de Santa Marta.
Durante la alerta por deslizamiento, absténgase de transitar con vehículos con cargas pesadas sobre carreteables ubicados en la zona de ladera
Si transita por una vía que colinda con cerros o a su paso observa deslizamiento de tierra o material rocoso, informe a la línea de emergencia y absténganse circular
Lo que se busca es hacer de Santa Marta una ciudad cada vez menos vulnerables al riesgo de desastres.