Las fuerzas rusas bombardearon deliberadamente la prisión de Olénivka, donde estaban retenidos prisioneros de guerra ucranianos. Así lo dijo el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania vía Facebook, informa Ukrinform.

“Las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa llevaron a cabo un bombardeo de artillería dirigido a una institución correccional en la localidad de Olénivka de la región de Donetsk, donde, entre otros, se encontraban prisioneros ucranianos”, dice el comunicado.

El Estado Mayor General señaló que los invasores rusos perseguían al menos dos objetivos: acusar a Ucrania de cometer “crímenes de guerra”, así como ocultar la tortura de prisioneros y las ejecuciones que llevaron a cabo allí por orden de la administración de ocupación y el mando de las Fuerzas Armadas Rusas.
Actualmente se están aclarando las consecuencias del bombardeo.

El Estado Mayor General enfatizó que, según la información proporcionada por el comandante de las Fuerzas de Misiles y Artillería de las Fuerzas Terrestres de Ucrania, las Fuerzas Armadas de Ucrania no lanzaron ataques con misiles o artillería en el área de Olénivka.
“Las Tropas de Misiles y Artillería de las Fuerzas Armadas de Ucrania, gracias a las armas de alta precisión recibidas de los países socios, lanzan ataques extremadamente precisos solo contra objetos militares rusos. Las Fuerzas Armadas ucranianas cumplen plenamente los principios y las normas del derecho internacional humanitario y nunca han disparado contra infraestructuras civiles, y mucho menos contra lugares donde es probable que haya prisioneros de guerra”, dice el comunicado.

El Estado Mayor General agregó que el enemigo continúa con sus métodos propagandísticos de guerra informativa con el objetivo de acusar a las Fuerzas Armadas de Ucrania de bombardear la infraestructura civil y la población, encubriendo así sus propias acciones insidiosas. Por lo tanto, tales declaraciones sobre el presunto bombardeo de la infraestructura civil y la población por parte de las Fuerzas Armadas de Ucrania son puras mentiras y provocaciones, cuya responsabilidad recae en Rusia, el país agresor, invasor y patrocinador del terrorismo.

Tomado de Ukrinform