El regreso de la competición en la NBA contó con una de las imágenes más esperadas: la protesta contra el racismo apoyando el movimiento ‘Black Lives Matters’.

En los dos partidos que se disputaron en la jornada inaugural de la burbuja de Orlando, Lakers-Clippers y Pelicans-Jazz, todos los asistentes se arrodillaron durante el himno nacional.

Jugadores, técnicos y árbitros secundaron la protesta en favor del movimiento antiracista ‘Black Lives Matter’. Las acción violó la reglamentación sobre himnos dentro de la NBA, vigente desde la década de los 80, que indica que se debe estar de pie durante la interpretación de los himnos.

Esta protesta pudiese presentar sanciones, pero el propio comisionado Adam Silver aseguró que esta reglamentación será modificada y no habrá ninguna sanción. “Respeto el acto unificado de protesta pacífica de los equipos en pro de la justicia racial y bajo estas circunstancia no forzaremos el cumplimiento de la arraigada regla que requiere que estén de pie durante el himno nacional”.

Por otro lado, son diversos medios internacionales los que se hacen eco de la censura de dicho momento durante la transmisión por televisión de ambos partidos, asegurando que las protestas no se emitieron.