El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, autorizó el envío de otros 1.000 soldados a Afganistán, con lo que el número de militares estadounidenses en el país asiático ascenderá a 7.000.
Así lo anunció este lunes el portavoz del Pentágono, John Kirby, en declaraciones a medios de comunicación estadounidenses.
Los 1.000 soldados adicionales pertenecen a la 82 División Aerotransportada y se trasladarán desde Kuwait a Afganistán.
Biden dijo este lunes que la misión de su país en Afganistán nunca fue crear “una democracia unificada y centralizada”, sino evitar los ataques terroristas contra suelo estadounidense.
Por otro lado, el presidente de Estados Unidos advirtió que su país defenderá a su gente con “fuerza devastadora” si los talibanes atacan a personal estadounidense o sabotean la evacuación de Afganistán.
“Defenderemos a nuestra gente con fuerza devastadora si es necesario”, aseveró.
Además, defendió “por completo” su decisión de la retirada militar de Afganistán, pese al caos desatado en Kabul, aunque reconoció que la toma de la capital afgana por parte de los talibanes se produjo “más rápido de lo anticipado”.
EFE