La mujer identificada como Juliana Andrea Real se suicidó en su apartamento, en el norte de la ciudad, al parecer por problemas relacionados con depresión.
La empresaria, de 25 años, fue trasladada hasta la clínica Portoazul, donde falleció cuando era atendida en el centro asistencial. La joven se ahorcó en su apartamento y su cuerpo inconsciente fue hallado por su pareja, quien había salido a hacer unas diligencias.
Real había publicado en sus redes sociales mensajes donde, al parecer, mostraba signos depresivos. La crisis financiera causada por la pandemia del COVID19, habría afectado la salud mental de la empresaria.
Su novio, con quien pensaba casarse en los próximos meses, salió a hacer unas diligencias rápidas y al regresar, encontró inconsciente a Juliana Andrea. De inmediato, la trasladó de urgencia a la clínica Portoazul donde finalmente falleció.
“He tenido días buenos y días malos. Me he despertado con ánimos a trabajar y en ocasiones no quiero salir de la cama. A veces tengo muchas fuerzas para seguir y a veces simplemente me derrumbo. Es normal, soy humana, no puedo ser fuerte siempre, no podemos culparnos, no debemos hacerlo”, contaba Juliana en una de sus publicaciones.