El Pentágono anunció este lunes una coalición militar integrada por 10 países para garantizar la seguridad y la libertad de navegación en el mar Rojo ante los recurrentes ataques de los rebeldes hutíes desde Yemen.
La coalición está formada, además de por Estados Unidos, por el Reino Unido, Francia, España, Italia, Países Bajos, Canadá, Noruega, Baréin y Seychelles, según informó en un comunicado el jefe del Pentágono, Lloyd J. Austin.
La coalición actuará bajo el nombre de ‘Operación Guardián de la Prosperidad’ y bajo el paraguas de la fuerza naval internacional Fuerzas Marítimas Combinadas (CFM, en inglés).
La CFM es una coalición formada por 39 países y comandada por el vicealmirante de la Marina estadounidense Brad Cooper, que tiene como objetivo proteger el flujo comercial y mejorar la seguridad marítima en las diferentes regiones donde tiene presencia.
Estos países abordarán conjuntamente los desafíos de seguridad en el sur del mar Rojo y en el golfo de Adén “con el objetivo de garantizar la libertad de navegación para todos los países y reforzar la seguridad y la prosperidad regionales”, de acuerdo al comunicado del Pentágono.
Austin aseguró que la escalada en ataques de los rebeldes hutíes “amenaza el libre flujo del comercio, pone en peligro a marineros inocentes y viola el derecho internacional” en una región que es “un importante corredor que facilita el comercio internacional”.
“Los países que buscan defender el principio fundamental de la libertad de navegación deben unirse para enfrentar el desafío que plantea este actor no estatal que lanza misiles balísticos y vehículos aéreos no tripulados (UAV) contra buques mercantes de muchas naciones que transitan legalmente por aguas internacionales”, sostuvo.
Austin, que este lunes estuvo en Israel, ha convocado una reunión para el martes con ministros de la región y otros países para abordar la situación en el mar Rojo.
Tras el estallido de la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza, los hutíes, respaldados por Irán, han lanzado varias andanadas de misiles y drones contra el sur de Israel en estos dos últimos meses y también contra buques con la bandera del Estado judío o propiedad de empresas israelíes en el mar Rojo y el estrecho de Bab al Mandeb.
Desde el pasado viernes, los principales grupos de transporte marítimo han ido anunciando que suspenden sus operaciones en el mar Rojo, entre ellos Maersk y Hapag-Lloyd, y hoy se les sumó la petrolera BP, al cancelar temporalmente el paso de sus embarcaciones por la zona.
La pasada semana el presidente de Israel, Isaac Herzog, reclamó “una coalición verdaderamente internacional” para combatir a los rebeldes hutíes de Yemen, para que las acciones encabezadas por Estados Unidos sean “impulsadas y fortalecidas”.