La Policía Nacional de Colombia, a través de la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL (DIJIN), en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, y en articulación con el Servicio de Seguridad Interior de la Embajada de Francia en Colombia, logró la captura de tres presuntos narcotraficantes en las ciudades de Bogotá, Bucaramanga (Santander) y Palmira en el Valle del cauca, dedicados al tráfico de cocaína líquida usando como fachada dos empresas de exportación de pulpa de fruta.
A inicios de septiembre de 2018, mediante una diligencia de registro y allanamiento a una bodega que prestaba servicio de conservación, congelamiento y refrigeración de productos perecederos, ubicada en el barrio las Ferias de la ciudad de Bogotá, fueron halladas 5 canecas con pulpa de fruta contaminada con estupefaciente líquido “Clorhidrato de Cocaína”, proveniente del departamento del Valle del Cauca. En el procedimiento fue incautada más de media tonelada de cocaína liquida.
Para el mismo mes se logró establecer una relación de hechos con un evento materializado en la ciudad de Cartagena, en la que una empresa de productos alimenticios pretendía exportar 110 canecas de pulpa de fruta congelada, las cuales, al realizar inspección por parte de unidades de Antinarcóticos, establecieron que 5 canecas contenían pulpa de fruta contaminada, con cocaína líquida, allí, fue incautada más de una tonelada del estupefaciente.
Por esto se inició una investigación que duró 3 años, en la que se obtuvieron suficientes elementos materiales probatorios, con los que fue posible dar con la captura de los tres cabecillas de una organización criminal dedicada a traficar con cocaína liquida mediante esta particular forma; a sus rutas trazadas para llevar la cocaína al continente europeo, le llamaban sutilmente “la ruta de la fruta”, la cual iniciaba en la ciudad de Cali, pasando por Bogotá y la ciudad de Cartagena, donde era enviada vía marítima o aérea.
Esta organización criminal tenía su zona de influencia en los departamentos de Cundinamarca, Valle del Cauca, Bolívar y Santander, y a través de empresas con permisos para exportación, realizaban el envío de estupefacientes mezclados con pulpa de fruta; su centro de operaciones delincuenciales se encontraba ubicado en la ciudad de Cali, allí, era elaborado el alijo para finalmente ser empacado en canecas metálicas y almacenado en empresas que prestaban el servicio de congelación, posteriormente este producto era enviado al puerto de Cartagena, para luego a través de contenedores ser enviados a países Europeos.
Todas las actividades criminales de la organización eran coordinadas por alias “Delio” y alias “Jenifer”, quienes fungían como representantes legales de las dos empresas dedicadas al tráfico de estupefacientes, con la ayuda de Alias “Mao”, persona encargada de la logística en la ciudad de Cali, en cuanto al almacenamiento, coordinación de conductores y la elaboración de la fruta.
En el momento de la captura de alias “Delio”, llevada a cabo en vía pública, este se encontraba violando una medida de aseguramiento domiciliaria por el delito de fabricación y comercialización de sustancias nocivas para la salud, que pesaba en su contra, logrando evidenciarse así, que “Delio”, continuaba realizando negocios ilícitos.
Los capturados fueron presentados ante un Juez de Control de Garantías, quien legalizó su captura y un Fiscal les imputó cargos por los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, y una vez finalizadas las audiencias el juzgado profirió medida de aseguramiento domiciliaria para los tres individuos.