Río de Janeiro y Sao Paulo, anunciaron el aplazamiento de los desfiles de las escuelas de samba del carnaval para el 21 de abril.
La decisión se tomó como medida para frenar el avance de la pandemia del COVID-19.
Las alcaldías consideraban inicialmente que, por realizarse en escenarios con acceso restringido como los sambódromos, en donde sería posible exigir certificado de vacunación y hasta prueba negativa de Covid-19 al público, los desfiles de las escuelas de samba no contribuirían para agravar la pandemia en Brasil.
La fecha escogida para la realización de los desfiles, el 21 de abril, y adicional el viernes 22 de abril permitiría organizar un carnaval de cuatro días.
Los mandatarios de estas ciudades alegaron que optaron por seguir recomendaciones de los científicos, que consideran poco prudente promover aglomeraciones de miles de personas en momentos en que, impulsada por la variante ómicron, la covid registra contagios récords en Brasil.
Los especialistas consideran que los números seguirán creciendo en las próximas semanas y que la tercera ola de la pandemia llegará a su pico en Brasil en febrero, cuando comenzará a ceder, como viene ocurriendo en los países europeos que también registraron números récords de infecciones por la ómicron.










