Anticipándose a lo que sería un nuevo escándalo dentro del Ejército, por el posible manejo irregular que se les habría dado a las unidades de inteligencia y contrainteligencia militar, el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, anunció que 11 oficiales fueron retirados, y un brigadier general pidió su retiro voluntario.
“Hoy se aparta y se retiran a 11 oficiales y un brigadier general pidió su retiro voluntario”, dijo el ministro de defensa Carlos Holmes Trujillo.
El Fiscal General de la Nación, Francisco Barbosa, ordenó documentar el expediente, para establecer las responsabilidades respectivas, y advirtió, que se debe llegar hasta las últimas consecuencias en este nuevo escándalo que sacude al Ejército.
Por estos seguimientos ilegales, desde hace un tiempo viene en curso una investigación, que le fue asignada a una fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia, a lo que el fiscal Barbosa, ordenó documentar y priorizar el caso. Fuentes del ente acusador, señalan que no hay privilegios para nadie y que se investigará a quien se tenga que investigar.
En el artículo publicado por la Revista Semana, se señala que los seguimientos, en su gran mayoría son a periodistas, varios de ellos corresponsales extranjeros.
También aparecen exministros, generales, funcionarios y sindicalistas, de quienes uniformados de inteligencia militar, habrían recopilado información como números de teléfono, direcciones de residencia y trabajos, correos electrónicos, amigos y círculos cercanos.