Aunque las ventas en las tiendas de Barranquilla y el Atlántico mejoraron entre junio y julio, registrando caídas entre un 10 y un 40 % frente a las registradas en abril que eran de entre un 20 y 60 % dependiendo el estrato social, los tenderos tienen mayores expectativas con la reapertura de más sectores económicos.
“Aún están estables, pero esperamos que, a finales de agosto, cuando las personas reciban sus mesadas, todo mejore y pueda darse una reactivación económica”, manifestó Orlando Jiménez, directivo de Undeco.
Los tenderos esperan una mayor dinámica económica que les ayude a levantar las ventas, ya que abril fue uno de los meses más críticos en materia de ganancias, en comparación con principios de año, cuando la pandemia aún no había llegado al país.