El aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio a 2021 y la prevista recesión histórica que sufrirá Brasil este año, como consecuencia de la pandemia de la COVID-19, no espantó el interés de las empresas en patrocinar el deporte olímpico brasileño. Por el contrario, lo reforzó.
Así lo afirmó la directora de Comunicación y Marketing del Comité Olímpico Brasileño (COB), Manoela Penna, que dijo que la entidad no sólo mantuvo todos sus patrocinadores para el ciclo olímpico que concluye en Tokio, sino que renovó contratos con la mayoría y atrajo a nuevos socios para el periodo que concluirá con los Juegos Olímpicos de París 2024.