El gobierno de Colombia comunicó este martes que las acusaciones contenidas en la misiva enviada por el Consejo de la Federación de la Asamblea Federal de la Federación Rusa, no corresponden a la realidad y constituyen una distorsión de la posición de Colombia, compartida por varios países de la región, y de sus actuaciones concretas en relación con el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro en Venezuela.
Según el jefe de Estado, Colombia ha respondido a la crisis multidimensional que atraviesa Venezuela, y de la cual es responsable el régimen de Nicolás Maduro, desde la legalidad, la solidaridad y la responsabilidad.
El gobierno colombiano reitera que la transición a la democracia debe ser conducida por los propios venezolanos pacíficamente y en el marco de la Constitución y el derecho internacional, apoyada por medios políticos y diplomáticos, sin uso de la fuerza.
La situación de Venezuela constituye un asunto regional y hemisférico que no debe ser empleado como instrumento de ninguna competencia geopolítica.
En ese sentido, Colombia reitera que cualquier despliegue o incursión militar en apoyo al régimen de Nicolás Maduro pone en riesgo la transición democrática y la normalización constitucional en Venezuela, y constituye una amenaza a la paz, la seguridad y la estabilidad en la región.