La Procuraduría comprobó que “la mujer se encontraba en situación de indefensión y vulnerabilidad en relación con la condición física del uniformado”.
Por agredir a una mujer al propinarle una patada en el rostro durante una manifestación convocada en Bogotá como parte del Paro Nacional, la Procuraduría General de la Nación destituyó e inhabilitó por el término de 12 años y seis meses al entonces comandante de Escuadra Móvil Antidisturbios ESMAD de la Estación de Policía Suba, Eliécer Cardozo Barón.
En el fallo de primera instancia, la Entidad determinó que, como consecuencia del exceso en el uso de la fuerza durante la neutralización de un tercero, el uniformado causó daño a la ciudadana ocasionándole lesiones en su cabeza, cuello, tórax, abdomen y extremidades inferiores, las cuales fueron documentadas tanto en el informe pericial de medicina legal como en el examen médico realizado en una unidad de urgencias.
El ente de control aseguró que durante el procedimiento llevado a cabo el 21 de noviembre de 2019, el uniformado “guardaba una ostensible condición de superioridad por el uso de un uniforme con especificaciones especiales para su protección en caso de agresión y por el entrenamiento recibido, en su calidad de integrante del ESMAD”.
Así mismo recordó que la aplicación de la fuerza debe ser considerada por parte de los integrantes del ESMAD “como la última opción utilizada para salvaguardar la vida, y la integridad física, tanto de los ciudadanos como de los propios agentes, y en todo momento debe regirse por los principios de legalidad, necesidad, proporcionalidad y racionalidad”.
La Procuraduría calificó la falta del disciplinado como gravísima a título de dolo y afirmó que contra esta decisión procede el recurso de apelación ante la Sala Disciplinaria Ordinaria de Juzgamiento, y reiteró que a través de la Estrategia “Promujeres: Una Procuraduría comprometida con las Mujeres” vigila las acciones frente a la superación de violencias por razones de sexo y género en el país.