El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) tiene bajo su custodia a 1.050 niños y niñas venezolanas que, la mayoría de las veces, han llegado a Colombia en situación migratoria irregular, precisó la institución.
Se encuentran en estos momentos en centros del ICBF o en hogares sustitutos, tras quedar huérfanos, ser separados de sus padres, o ser abandonados en medio de las condiciones precarias que padecen casi todos los migrantes.
Una buena parte de esos niños son encontrados por el Bienestar pidiendo monedas en la calle o divagando días enteros con sus padres buscando dónde comer.
De acuerdo con la estadística del Bienestar Infantil, entre 2021 y marzo de 2023, el Gobierno reportó que tuvo que intervenir en 7.690 casos de restitución de derechos de menores de edad cuyos padres o acudientes eran venezolanos.
De este total es que se derivan los 1.050 que, dadas las condiciones extremas de vulnerabilidad que determina el ICBF, son llevados a centros asistenciales para ser custodiados por el Estado mientras los padres logran demostrar que están en capacidad de asistirlos, llega otro familiar por ellos o son adoptados.